¿Y eso en lo que estás metido ahora qué es? ¿Ya no trabajas en la consejería de educación?
Estas preguntas han sido algunas de las que he respondido estos días a los compañeros y amigos que me han preguntado por lo publicado en las redes, después de vivir 3 días fantásticos en Google España junto con 35 innovadores, 6 coaches, varios dinamizadores, partners, googlers… Hasta el nominado a los Global Teacher Prize, David Calle (Unicoos) apareció por allí.
Todo comienza hace años cuando me uní al programa de Google For Education donde comencé a formarme en el Google Certified Educator Level 1, una certificación para docentes que trabajan con estas herramientas gratuitas. Todo ello animado por mis amigos de Omnia Infosys, partner educativo de Google para las Islas Canarias. Esta certificación consiste en realizar un curso de capacitación muy intuitivo que te da ideas de cómo llevar las herramientas de Google al aula, para luego realizar un examen de 3 horas de duración, con preguntas tipo test, de ordenar, relacionar… y supuestos prácticos. Para superarlo hay que sacar un 80% de aciertos o más, con lo que a la primera no es fácil. La capacitación es gratuita y examinarse vale 10$.
Tras esta certificación me pongo a indagar y descubro que estas herramientas se llevan genial con el iPad y que funcionan de maravilla en el ordenador con Google Chrome. Y esto me hace animarme a subir un escalón más hacia el Google Certified Educator Level 2. Una certificación que me pareció más asequible sobre todo porque ya estaba mucho más familiarizado con el entorno Google. Tenía el mismo sistema de capacitación y certificación que el Level 1, y te podías examinar al mismo precio.
Con esto en marcha y con la experiencia adquirida practicando en el aula, decido subir un escalón más y a principios de 2017 me pongo con el Google Certified Trainer, una formación y certificación para formadores. Y como no había nadie en Canarias, pues cuento con el apoyo de Omnia y de un partner de los grandes, iEducando.
Con esto comienza la aventura de dar formación para Google en centros de Canarias como: Buen Consejo La Laguna, Casa Azul, Salesianos La Orotava, Salesianos La Cuesta, La Pureza, centros públicos mediante los CEP… Y me especializo en Google Classroom, actualmente el mejor LMS (aula virtual, descrito de manera muy vulgar).
Llegado 2018 se abre el periodo para «aplicar» a la Academia de Innovadores a celebrar por primera vez en Madrid. Los innovadores certificados de Google son hoy en día unos 1300 docentes por todo el mundo que forman una comunidad espectacular.
Para aplicar hay que presentar la solicitud, adjuntar el certificado de nivel 2 y subir un vídeo con un reto explicando el mismo y por qué eres la persona adecuada para abordarlo.
Se hizo la selección de 36 innovadores entre los que se encontraban grandes nombres como: César Poyatos, Daniel Amo, Domingo Chica, Raúl Diego… y otros tantos que he descubierto en estos días y de los que me he hecho fan. Además contamos con 6 coaches de lujo: Samuel Landete, Carlos Moreno, Manel Trenchs, Iñaki Hernández, Marta López y como no, mi amiga, inspiradora, creadora y súper generadora de ideas locas, Doña Rosa Liarte, que por fortuna para mí y desgracia para ella (¿maestra se copia el enunciado?, ¿a boli o a lápiz?), sería mi coach.
A los pocos días de conocer los seleccionados, recibimos una caja misteriosa. Tenía el logotipo de Innovators, un billete del monopoly pegado por fuera y un candado de 4 dígitos que la cerraba.
En mi billete figuraba un 10 como número y estaba acompañado de los símbolos )+. Si la miraba por detrás ponía Team Rosa. Así que manos a la obra. Usando twitter conseguí contactar con todos los que habían recibido la caja y tenían por detrás escrito Team Rosa: María Barceló, Guillermo Negre, David Santos, Vicenç Serralta y Raúl Diego (que casi le llega en navidad). Juntando los billetes de todos, formamos una operación matemática: (50*100)-(1*20+10)+500= y nos daba el número que abría la caja.
Tras esto abrimos y encontramos un papel cuadrado con una casita del monopoly de un color cada uno y unos puntitos. El último del grupo recibía en ese papel una web. Al abrirla nos indica que debemos usar una combinación de colores para desbloquear el reto. Raúl Diego, que es un hacha en los BreakOut, lo resolvió sin respirar.
Y esto nos llevó a otra web que nos daba unas letras. Finalmente las juntamos con los demás equipos y sacamos una frase: «Innovators Madrid…». Tras ponerla en la web, nos desbloqueaba el juego y nos citaba para el día 3 de octubre a las 14.00 en las oficinas de Google Madrid.
Quedamos todos para tomar algo antes de entrar ya que poco sabíamos de lo que iba a pasar en Google. Y vamos conociendo a un montón de personajes, a cada cual más interesante y con un bagaje espectacular. Raúl Martínez dinamiza al grupo y nos ponemos en marcha con la alegría y la ilusión de María Barceló.
Nos reciben al llegar Gonzalo Romero, animador de lujo para estos días, y Pedro Díez, CEO de iEducando. Con ellos nos identificamos y subimos a Torre Picasso.
Allí entramos en nuestra sala para estos días, un lugar de trabajo privilegiado:
Y nos agasajan con unos regalitos geniales: camiseta, mochila, botella, libro de 50 Cosas que puedes hacer con Google Classroom, acreditación y una genial libreta de Rocketbook. Con esta libreta puedes tomar nota como toda la vida, marcar al final de la página un icono y con la app puedes enviar a donde tu quieras un pdf con lo que has escrito: a drive, al correo, a Evernote… Tienen una versión de la libreta que se borra al meterla en el microondas!!!
Tras la presentación de Gonzalo Romero, toma la palabra Dan Stratford de Google for Education que nos comenta por qué estamos allí, por qué nos han elegido y qué vamos a hacer en estos días. Luego se presentan Sabrina Espasandín (Sabrina, ¡te queremos!) Les McBeth y Mónica Martínez, que harán de dinamizadoras de nuestro paso por la academia.
Pero antes de empezar, paseo por las oficinas de Google. Toda una aventura: comida y bebida cada 30 pasos, gimnasio, sauna, rincones de relax, rincones de reunión, mesas personalizadas, batidora-bicicleta…
Durante los tres días hicimos muchas actividades:
- BreakOut con nuestras propias cajas para presentarnos a nuestro Team, que bautizamos como #AlLío Team. Aunque también barajamos «Las Nancys Rubias» o «Pink Team».
- Energizers, pequeñas actividades para cohesionar al grupo: desde jugar a piedra, papel o tijera hasta buscar compañeros con diferentes dinámicas. Cada vez que se hacía un juego se premiaba a los ganadores. Nuestro equipo destacó por ganar una sola vez, porque ni haciendo trampas podíamos vencer.
- Sprints, donde Sabrina y compañía nos exprimíancon el diseño de nuestro proyecto para responder al reto, todo ello dentro de un proceso de Design Thinking muy guapo.
- Sparks, tal vez lo que más me gustó, experiencias de Googlers (trabajadores de Google), compañeros de academia y alguna sorpresa como David Calle. También cada uno de los coachs hizo un Spark, y personalmente me encantó el de Samuel Landete, traspasando el sistema de trabajo de Google a las aulas con el 80-20 (trabajar 20% del tiempo en lo que realmente te gusta) y llegando a la Genius Hour (algo que pude aprender en el Level II de Flipped Learning con Jon Bergmann). Otros miembros de la academia como Mark Wagner o Wendy Gorton nos ayudaron en nuestro proceso.
Destacaba los momentos de compartir la comida que podíamos degustar cada poco tiempo y la cantidad de bebidas que podíamos ingerir. Pero también hubo momentos para la distensión con un agradable paseo por Madrid centro y una buena cena en un mejicano muy rico, además del posterior karaoke.
Por último, nos graduamos y celebramos nuestro nuevo status de Innovators.
Mi proyecto se ha centrado en la incorporación de las familias en los procesos de implantación tecnológica en los centros educativos, y espero, tras el año que tenemos para desarrollarlo, que desemboque en un nuevo programa de Google que conecte a la comunidad educativa para vencer miedos a la seguridad tecnológica y acerque aún más a las familias a las metodologías activas.
Así que ahora #ESP18 se ha convertido en más que un hashtag, se ha convertido en una comunidad de soñadores dispuestos a aportar soluciones a los retos que presenta la educación.
PD: Nunca dejes que Rosa Liarte te saque una foto con una Polaroid!